Cuidado con ‘la vuelta al cole’

Ya termina este segundo verano de pandemia y la cosa no ha mejorado como se esperaba con las vacunas. Sin inmunidad de grupo y a la espera de que se aprueben desde los organismos internacionales de la salud la administración de una tercera dosis de la vacuna

Fuente:EFE

Nos encontramos en España ante una situación en la que mueren cerca de 200 personas al día por el virus, inmersos en una quinta ola que ha devuelto infecciones a los centros de cuidados y que también se puede dar en la vuelta a las aulas de los más jóvenes.

Es imprenscindible acelerar la campaña de vacunación para que todas aquellas personas que vayan a asistir a clases en cualquiera de los niveles formativos, puedan hacerlo con las máximas garantías sanitarias. El año pasado, a pesar de la situación en la que nos encontrábamos, ni las comunidades autónomas ni el Ejecutivo estuvieron a la altura de lo que necesitaba la sociedad española; ahora hay una nueva oportunidad para poder garantizar a la ciudadanía lo que se merece en materia de Educación y Sanidad.

Es necesario ampliar turnos y llamar a más personal cualificado para poder vacunar y que no pase en lugares como el Hospital Isabel Zendal de Madrid, donde a pesar de estar abiertos las 24 horas del día, durante la noche no hay apenas citas ni personal para vacunar. Es de vital importancia poner los medios necesarios para lograr lo que a día de hoy supone un reto.

Los primeros en dar comienzo a la actividad docente serán los estudiantes universitarios, de grado o máster, y los de ciclos de formación media y superior. En estos casos, en su mayoría podrían llegar al pistoletazo de salida del curso con dos dosis, pero hay que tratar de que esa posibilidad sea una realidad. Más tiempo tendrán los que cursen la educación escolar para ser vacunados, pero también es probable que lleguen con menos garantías de comenzar las clases con la pauta completa, ya que en muchas comunidades todavía están vacunando jóvenes adolescentes.

Desde la asociación pedimos a las administraciones que pongan en valor nuestro sistema público de Sanidad y, repetimos, que amplíen horarios y plantilla para poder dotar de mayor seguridad a todos los españoles. La vuelta al trabajo y a los estudios tras el verano debe hacer que los políticos estén alerta ante los efectos destructores que consigo puede volver a traer el Covid-19 y sus variantes.

Estos refuerzos en las vacunas no pueden quedarse ahí, sino que hay que complementarlos con medidas de seguridad que puedan beneficiarnos a todos. Para ello es necesarios la cooperación entre los agentes políticos y expertos en la materia, solemos incidir siempre en la necesidad de apoyo entre los gobiernos regionales y Moncloa, pero es que sin el entendimiento común, imprescindible en democracia, no solo no lograremos acelerar la vacunación, sino que seguiremos poniendo en peligro nuestras vidas por culpa de las pataletas políticas.