Claves de los Presupuestos Generales del Estado

Tras un año convulso, al Gobierno le toca conseguir la aprobación de las Cortes de los Presupuestos Generales del Estado para 2022. No será tarea fácil después de la reducción en 1,6 puntos de la previsión de crecimiento para España este año (4,6%) por parte de la Comisión Europea.

FUENTE: EFE

Si ya de por sí el proyecto de Presupuestos no era realista (tal como han subrayado diversas instituciones públicas y privadas en los últimos meses), la revisión del crecimiento previsto por parte de la Comisión Europea ha terminado de romper el discurso del Ejecutivo. Las cifras publicadas por el Gobierno se quedarán lejos de cumplirse tras lo expresado por la Comisión Europea, con un gasto elevado que no permitirá cumplir el déficit y por el que Europa pedirá explicaciones a partir de 2023 y, por si fuera poco, con una estimación de crecimiento del PIB que para el año que viene se ha reducido en ocho décimas (5,5%).

El proyecto de ley, que está ahora en manos de los grupos políticos de la Cámara Baja (especialmente los socios habituales del Gobierno), fue presentado por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, hace aproximadamente un mes; ahora es momento de negociar y todo queda supeditado a los clásicos acuerdos entre partidos en base a distintos intereses ideológicos, pero primero analizaremos las claves de estos PGE para el año que entra.

Los del año próximo, serán los presupuestos con mayor gasto público de la historia, 240.000 millones de euros, gracias a la entrada de los fondos europeos a nuestro país, que han sido muy importantes para dotar de semejante músculo financiero al Estado. El Gobierno, que da por hecho que contará con la llegada de 27.633 millones adicionales de los fondos europeos, confía en que éstas sean las cuentas que impulsen la recuperación.

Empleo

Según los datos manejados por el Gobierno, la recuperación económica para el próximo año está cifrada en un 7%, lo cual se verá en el empleo que, según este texto, en España crecerá un 2,5%. Esta situación llevará a una tasa de paro del 14% para finales del próximo año.

Para la cartera de Trabajo, la reactivación del mercado laboral supondrá una reducción en las prestaciones y mayores ingresos en cotizaciones. Por su parte, el SEPE prevé un gasto de cerca de 22.500 millones de euros que en su mayoría irán a parar a prestaciones no contributivas. En total, este gasto se reducirá un 10% en comparación con el de 2021.

Energía

Los Presupuestos Generales del Estado para el año 2022 establecen además un incremento del gasto del 1,2% en el capítulo de energía e industria, que contará con una dotación de 11.316 millones de euros. En este apartado, la inversión experimenta un incremento vinculado a la mayor compensación para la industria para frenar el incremento del precio de la luz.

Sanidad

Año y medio después del inicio del coronavirus, la partida del Ministerio de Sanidad cae por la menor inversión en vacunas. En concreto, cae un 9,9%. Sin embargo, la cifra tiene dos lecturas: teniendo en cuenta las vacunas, hay menos presupuesto total (ese 9,9%), pero sin ellas hay más (un 11%).

El año pasado, Sanidad obtuvo un presupuesto de 7.330 millones debido a la inversión en las vacunas que estaban a punto de llegar. Sin embargo, este año, con 37 millones de personas ya vacunadas, se va a destinar menos de la mitad de dinero a este aspecto. Si en las previsiones del año pasado la vacunación supuso 2.436 millones de los Presupuestos, en las de éste se quedará en 1.172 millones.

Cultura

El Ministerio de Cultura ya contó en este ejercicio con su mayor presupuesto en una década, pero este año el Ministerio contará con un 38,4% más que en 2021. El dinero con el que contará la cartera de Miquel Iceta pasará de cara a 2022 de 1.148 millones de euros a 1.589 millones. De ellos, 356 millones proceden de la Fondos de Recuperación europeos.

Recortes

El Gobierno sí ha reducido su asignación a la corporación RTVE un 6,3% para dejarla en 443 millones de euros, 30 millones menos que los adjudicados en los anteriores Presupuestos Generales del Estado.

Además, el Gobierno congela la asignación dedicada a la Casa Real. En concreto, ha previsto un total de 8.431.150 euros en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2022. Esta cifra implica una congelación respecto a la del ejercicio 2021 tal y como se consignó en la sección 01 de las cuentas del Estado y publica la Casa de su Majestad el Rey en su página web.

Infraestructuras e interconexiones globales, antídoto contra el nacionalismo envuelto en el falso ecologismo

La ampliación del aeropuerto de El Prat de Barcelona, el AVE que conectará las tres capitales de provincia vascas con Madrid o las obras del tren de alta velocidad con Navarra son continuamente boicoteadas y saboteadas por un nacionalismo que, en sus diferentes manifestaciones políticas y sociales, manipula banderas como la del ecologismo para mantener bajo control a sus territorios, restándoles capacidad de crecimiento y desarrollo.

Fuente:EFE

Históricamente, el nacionalismo excluyente se ha envuelto en eslóganes y soflamas para intentar hacer «legítima» una lucha contra el conjunto de los ciudadanos. En este sentido, el nacionalismo e independentismo tanto de derecha como de izquierda emplean un falso ecologismo meramente instrumental para impedir el desarrollo de redes, infraestructuras e interconexiones vitales, tergiversando la normativa europea de protección de los espacios naturales. 

No sólo es posible, sino que es imprescindible, conciliar la realización de las obras con una apropiada conservación ambiental y un desarrollo del territorio compatible con los sectores económicos y sociales allí instalados. No debemos permitir que, primero el terrorismo y después el independentismo, obstaculicen el desarrollo de nuestro país, infligiendo pérdidas cuantiosas a largo plazo. Pasó con el desarrollo de la energía nuclear, con las conexiones por carretera, con la alta velocidad ferroviaria… No puede volver a ocurrir con las infraestructuras que van a reforzar nuestra conectividad con Europa y el resto del mundo.

En el caso concreto de la ampliación del aeropuerto de El Prat, el argumento falsamente ‘ecologista’ de la protección de la reserva natural de La Ricarda es la excusa para dilatar los plazos y continuar con la reivindicación del “agravio” entre Cataluña y el resto de España en materia de infraestructuras. Cierto es que la afectación de espacios protegidos necesita de la autorización de la Comisión Europea, pero con un plan bien armado y compensaciones ambientales razonables, el órgano europeo da su aprobación.

Esta bandera falsamente ecologista la ha cogido tanto el nacionalismo de izquierda de En Comú Podem como el de derecha de Junts per Catalunya. Un ejemplo es el expresidente de la Generalitat Quim Torra, el cual ha cargado contra esta ampliación diciendo que ya “basta de poner los intereses económicos por delante de la naturaleza”. De esta forma, continúa la línea oficial de su partido instando a los grupos independentistas en actuar en favor de un independentismo catalán que “tome la bandera del medio ambiente”.

Conocemos muy bien a los independentistas. Bajo este discurso defensor del medioambiente se esconde una de las bases del nacionalismo y más cuando se pretende la consecución de un país independiente. El pánico a la apertura exterior se esconde detrás de estas palabras de los líderes independentistas que pretenden no abrir de más su territorio. Cuanto más proteccionismo para el nacionalismo mejor, para ellos carece de sentido la ampliación de El Prat y por eso quieren evitar a toda costa, Europa mediante, esta renovación.