Responsabilidad ante los cambios

Lo hemos pasado muy mal durante los últimos dos años debido a la incidencia de la pandemia, que ha cambiado nuestras vidas tal y como las conocíamos, y, en algunos casos, hay gente que no conoce otra cosa si nos referimos a los más pequeños. Ante esta situación de la que todos estamos cansados y con la evidente mejoría de la situación, el Gobierno retirará las mascarillas en interiores este martes. Para algunos muy tarde, para otros muy pronto pero el fin está, si nada cambia, cada vez más cerca de llegar.

FUENTE: EFE

Por eso desde “La España que Reúne”, como asociación civil, queremos hacer un llamamiento a la responsabilidad. Independientemente de que sea muy tarde o muy pronto para retirar esta medida, debemos ser responsables con nosotros y los demás para no andar en la dirección contraria a la deseada. El virus sigue vivo aunque ya no se hable tanto de el, a la vista está el caso de otros países con mayor densidad de población con la relajación de medidas para luchar contra la pandemia.

España, su gente y su actividad económica no pueden permitirse volver atrás en un contexto de precios disparados en prácticamente todos los bienes de primera necesidad, y eso depende de todos y cada uno de nosotros. El fin de la obligatoriedad de algo no conlleva que se tenga que dejar de usar, más aún si nos referimos a la salud. Somos de los últimos países de la Unión Europea en retirar su uso, pero en estos temas no debemos andar con prisas.

La mascarilla seguirá siendo obligatoria para trabajadores y visitantes de hospitales, centros de salud y demás centros médicos y asistenciales, así como en el transporte público, uno de los focos más peligrosos para el virus. En el resto de espacios dependerá de nuestro criterio si creemos necesario su uso. En cualquier caso, ante esta situación, no dejemos que nadie nos diga cuánto debemos o no debemos usarla.

El problema reside ahora en el tiempo que debemos guardar estando contagiados del virus, o cómo debemos actuar si hemos estado con personas contagiadas. España es el único país de la Unión Europea que ha eliminado el aislamiento de los casos leves, esto es un riesgo potencial importante que, sumado a la posible retirada de la mascarilla y a la población bajando la guardia, puede provocar un desastre.

El Gobierno no puede retirar la vigilancia sobre este problema ante un cambio tan grande después de dos años. Está bien que la gente empiece a recuperar paulatinamente sus vidas y es el Ejecutivo el que debe garantizar que esto suceda en las mejores condiciones, pero también depende de nosotros lo responsables que seamos ante esta rebaja de las medidas contra el coronavirus.